Tras conocer el incidente, la comuna puso a disposición las cisternas que acarrearon miles de galones de agua para apoyar en el control de las llamas que afectaron a más de 15 vehículos en mal estado que se encontraban en el predio, los cuales habían sido decomisados desde hace más de cinco años y no fueron reclamados por sus propietarios.

Se utilizaron más 75 mil galones de agua para mitigar las llamas, mediante camiones cisterna de los Bomberos y de la AMDC.

De esta manera, se evitó que el siniestro se extendiera a los terrenos vecinos y provocara más daños.

Los equipos de Protección Civil se hicieron presentes en el lugar para ayudar a sofocar las llamas, confirmó el gerente del Comité de Emergencia Municipal (Codem), José Miguel Mendoza, quien agregó que en esta temporada son recurrentes los incendios en zacateras en la capital.

También colaboraron los equipos de la Unidad de Respuesta Inmediata (URI) la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales de Honduras (Copeco).

En tal sentido, pidió a la población tener mucho cuidado y precaución con este tipo de incidentes, ya que el fuego puede propagarse a las viviendas cercanas y el humo tóxico también puede afectar la salud de las personas.

Los carros afectados tienen más de cinco años de estar en ese lugar, luego de ser decomisados, por lo que no hay ningún carro nuevo o en buen estado, porque nunca fueron reclamados por sus propietarios, aseguró Mendoza.

Los elementos de la Policía Municipal también contribuyeron a mitigar las llamas.

Este incendio que comenzó en una zacatera a la orilla del río Chiquito y se extendió al entrar en contacto con materiales inflamables como neumáticos, cables y árboles secos. Solamente se reportaron pérdidas materiales.